ORO, PLATA Y PLOMO EN EL ARROZ

ORO, PLATA Y PLOMO EN EL ARROZ - Paellissimo

El ingrediente principal de nuestro Kit Paellíssimo es el arroz, sin él no habría surgido la marca Paellíssimo. Nuestro respeto, pasión y gusto hacia este cereal nos lleva a crear la marca con la misión de llevar los Arroces del Levante y la Paella Valenciana a cualquier parte del mundo.

Nuestro arroz proviene directamente de agricultores de la albufera de Valencia, posee D.O. Arros de Valencia, y son ellos quienes nos transmiten toda la historia de este cereal tan respetado y tan consumido.

La variedad de arroz que hay en nuestros kits es la denominada “Albufera". Es una variedad joven, surgida de la mezcla entre la variedad bomba y la variedad senia. Se caracteriza por ser un grano perlado, cristalino y redondo que abosrbe mucho sabor y a la vez es muy resistente a pasarse.

Arroz de primera calidad con denominación de origen Albufera (valenciana)

¿Quieres conocer nuestro arroz variedad albufera?

Los agricultores llevan generaciones utilizando un curioso parangón. Establecen un paralelismo entre los diferentes estadios del arroz y metales muy conocidos.

Arroz en cáscara, almacenado en sacos en el granero

Cuando el arroz está en cáscara, amontonado en el granero, tiene un color dorado y vale mucho. Es como un tesoro, la recompensa al trabajo y al sudor de todo un año. Por eso dicen que es como el ORO. Además, en esta fase, el arroz conserva todas sus propiedades intactas por mucho tiempo.

Cuando los granos de arroz pasan por el molino y se pelan, cambian de color, incluso brillan por la acumulación de almidón y el pulido de su superficie. Por eso recuerdan a otro metal: LA PLATA. En este momento, se les ha puesto más trabajo y dinero encima, pero también se ha acortado el plazo que tenemos para consumirlo en condiciones óptimas mientras descansa en los almacenes.

A partir del instante en el que el arroz es envasado en un paquete para su comercialización, vuelve a cambiar de estadio. Nos recuerda al PLOMO esta vez porque ya pesa casi más de lo que vale y al tener una fecha de caducidad impresa en el envase, el agricultor siente la presión de tener que venderlo antes de que se estropee.

De ahí que este apreciado cereal pueda verse como oro, como plata y como plomo antes incluso de que llegue a manos del consumidor final.